El Instituto Internacional de la Prensa (IPI, por sus siglas en inglés), una red global de directores y periodistas de los principales medios de información en defensa de la libertad de prensa, condena el reciente asesinato del periodista Abelardo Liz en Colombia, quien recibió un disparo mientras cubría una confrontación entre las fuerzas armadas y manifestantes indígenas. El IPI también insta al gobierno colombiano a que adopte todas las medidas necesarias contra el aumento de amenazas de muerte contra varios periodistas.
El pasado 13 de agosto, Abelardo Liz, reportero de la emisora Nación Nasa, resultó muerto mientras cubría una protesta indígena en Corinto, situado en el norte del Cauca. El periodista indígena, quien reportaba las acciones del Ejército Nacional contra el movimiento Liberación de la Madre Tierra, murió por impacto de bala mientras lo trasladaban al hospital.
Además de la muerte del periodista, uno de los integrantes de la protesta fue asesinado y otro resultó herido cuando, según informó Nación Nasa, las Fuerzas Armadas de Colombia dispararon a los manifestantes nativos con ametralladoras.
Reportes en Colombia indican asimismo que 12 periodistas recibieron amenazas de muerte durante las últimas dos semanas. En Ipiales, Johnny Coral Benny y dos periodistas más fueron amenazados por Whatsapp debido a sus investigaciones sobre la inmigración ilegal entre las fronteras con Ecuador y Venezuela. Además, Benny informó que recibió varias llamadas telefónicas intimidatorias mientras trabajaba en Canal CNC. El periodista Mario Esteban Lopez recibió amenazas similares en mayo por la cobertura que realizó sobre el trato vejatorio a las personas en las fronteras de Colombia.
Por otro lado, un total de ocho periodistas en Santa Marta recibieron panfletos por Whatsapp, supuestamente del Ejército de Liberación Nacional (ELN), amenazándoles de muerte si no abandonaban el país en las siguientes 48 horas: ‘habrán consecuencias’, rezaba el comunicado. El panfleto acusaba a las periodistas de imponer ‘una ideología de derecha aliados con los paramilitares’. Sin embargo, el ELN niega la autoría de este.
El periodista y corresponsal de Caracol Televisión, Carlos Alfonso Perez Cedeño, también recibió llamadas amenazantes de un número desconocido. El interlocutor, informa Cedeño, le dijo que sería declarado un objetivo militar si no atendía una reunión en Venezuela.
“Instamos a Colombia a que detengan a los responsable del asesinato de Abelardo Liz”, dijo Scott Griffen, subdirector del IPI. “Además, estamos preocupados por las numerosas amenazas contra periodistas y urgimos a las autoridades competentes a que investiguen tales amenazas y adopten todas la medidas necesarias para proteger a los reporteros”.
