Read in English

El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, anunció el lunes que ha concedido indultos en dos casos de alto perfil relacionados con injuria y los medios de comunicación. En uno, el diario El Universo había sido condenado a pagar 40 millones de dólares en daños y perjuicios mientras sus tres directores, así como un ex columnista, habían sido condenados a tres años de prisión, respectivamente. En el segundo, los periodistas de investigación Christian Zurita y Juan Carlos Calderón habían sido condenados a pagar 1 millón de dólares cada uno debido a las acusaciones publicadas en su libro El Gran Hermano.

“He decidido (…) perdonar a los acusados concediéndoles la remisión de las condenas que merecidamente recibieron”, dijo Correa durante un discurso televisado, haciendo uso de su privilegio presidencial para conceder indultos, informó Reuters. Según medios locales, el Presidente dijo que estaba satisfecho porque los objetivos habían sido alcanzados y en los casos se había comprobado que la ley estaba por encima de “la prensa corrupta”. El Primer Mandatario describió los procesos legales como una lección para su país y agregó: “Hay perdón, pero no olvido”.

Los abogados de Correa fueron el lunes a la Corte Nacional de Justicia a presentar todos los documentos que acabarían con el juicio contra El Universo. Sin embargo, los directores del diario se mostraron cautos. “Ante la decisión que en uso de una facultad prevista en la ley ecuatoriana ha anunciado el presidente Rafael Correa, sobre las sanciones que nos impone la resolución de la Corte Nacional de Justicia, el Diario El Universo se pronunciará una vez que las condenas sean archivadas”, dijeron en la edición digital.

La semana pasada, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) solicitó medidas cautelares para los directores de El Universo –los hermanos Carlos, César y Nicolás Pérez- y el ex columnista Emilio Palacio. La CIDH ordenó al gobierno ecuatoriano suspender las sentencias contra los directores de El Universo, hasta una audiencia que se celebrará en Washington DC el 28 de marzo. En un comunicado, la CIDH dijo que emitió la orden judicial con el fin de garantizar el derecho a la libertad de expresión.

Sin embargo, el presidente Correa calificó la petición como “un total disparate” a través de su cuenta en Twitter. Alambert Vera, uno de los abogados del presidente Correa, dijo a la agencia Efe: ” Es un ataque en toda regla a la democracia, un ataque a la independencia judicial y un ataque a la jurisdicción interna”. Ricardo Patiño, Ministro de Relaciones Exteriores, Comercio e Integración, dijo: “Esto es una clara violación de la institucionalidad en el país (…) En el Ecuador existe un sistema jurisdiccional al que hay que respetar. No se le puede pedir al Gobierno que vaya a la corte y les digan: señores, no apliquen su sentencia, porque la CIDH lo dice”.

Expresiones de solidaridad con El Universo se evidenciaron en todas partes del mundo. En América Latina, periódicos de Argentina, Colombia, Costa Rica, México, Perú, Uruguay y Venezuela publicaron el artículo “No a las mentiras”, que llevó a la condena por difamación. Una serie de organizaciones internacionales, entre ellas el Instituto Internacional de la Prensa (IPI, por sus siglas en inglés) han expresado su preocupación sobre el caso.

Según reportes locales, Emilio Palacio, ex columnista de El Universo, y Juan Carlos Calderón, uno de los autores del libro “El Gran Hermano”, dijeron el lunes que la presión internacional había influido en la decisión de Correa, algo que el Gobierno ha negado.

El gerente de Libertad de Prensa del IPI, Anthony Mills, quien había advertido previamente que la sentencia era un “duro golpe a la libertad de expresión y la libertad de prensa en Ecuador”, celebró el anuncio: “Estamos muy contentos de escuchar sobre de la suspensión de las condenas, pero los procesos penales no deberían haber sido iniciados en primer lugar. Por otra parte, la noción misma de un indulto sugiere culpabilidad. El clima de libertad de prensa en Ecuador se ha visto gravemente dañado por estos últimos esfuerzos para intimidar a los medios de comunicación independientes”.

El IPI considera que las leyes que penalizan la difamación y la injuria sólo sirven para obstaculizar el escrutinio de las acciones de aquellos en el poder, mientras que privan al pueblo de la información que necesita para tomar decisiones.

Mills dijo: “El IPI está preocupado por las nuevas leyes y el uso de acciones judiciales para silenciar a los medios críticos en Ecuador. Hacemos un llamado a las autoridades a permitir que los medios de comunicación funcionen sin obstáculos, como debe ser en cualquier democracia saludable”.

El IPI ha expresado reiteradamente su preocupación sobre la libertad de prensa en Ecuador, en particular en los casos de El Universo y El Gran Hermano. En este último, los periodistas Christian Zurita y Juan Carlos Calderón fueron condenados a pagar una indemnización al presidente Correa por haber causado “daño moral” con un libro que denuncia la supuesta relación entre el hermano mayor del Presidente, Fabricio Correa, y empresas que ganaron millonarios contratos estatales.

El mes pasado, Ecuador trató de minimizar la autoridad de la Relatoría para la Libertad de Expresión de la Organización de Estados Americanos (OEA), que informa a la CIDH. Ecuador hizo una serie de propuestas que buscaban limitar el financiamiento y el alcance de la Relatoría, así como desacreditar a la Oficina del Relator Especial. Varias organizaciones de medios también han criticado la situación de asfixia que vive la libertad de prensa en Ecuador, especialmente a través del acoso a periodistas y al uso de leyes de difamación para silenciar cualquier oposición.