El Instituto Internacional de la Prensa (IPI, por sus siglas en inglés), una red global de directores y periodistas de los principales medios de información en defensa de la libertad de prensa, condena el asesinato de dos reporteros venezolanos en la sede del canal Guacamaya TV. Las víctimas fallecieron tras un operativo de las Fuerzas de Acciones Especiales (FAES) del gobierno de Nicolas Maduro.
El canal Guacamaya TV, que se autodefine como un equipo de “Coordinación Organizativo Frente de Comunicación Popular, Alternativo Comunitario y Socialista”, fue el objetivo de un operativo de las FAES debido a un supuesta información que vinculaba las dos víctimas con un grupo delictivo. Sin embargo, Nieves Zacarías era miembro del Frente Francisco Miranda, legado de Hugo Chávez, y activista político para el Partido Socialista Unido de Venezuela, dirigido por el actual presidente.
Franklin Torres, padre de Víctor Torres y director de Guacamaya TV, ha dicho que las FAES arrastraron a los dos fallecidos fuera de la oficina y procedieron a dispararles. A su hijo le dispararon una vez mientras Zacarías recibió dos disparos en el pecho. Torres lo describe como un ‘vil asesinato’ e insiste en que la información difundida por las autoridades es falsa y que las armas que las FAES supuestamente encontraron en la oficina fueron plantadas ahí después del incidente.
“El brutal asesinato de dos periodistas en las oficinas de un canal de televisión por las fuerzas armadas es atroz”, ha manifestado Ravi R. Prasad, director para la defensa de la libertad de prensa del IPI. “Los reporteros en Venezuela se enfrentan a represiones severas y muchos se han visto forzados a autocensurarse debido a las amenazas de este régimen autoritario, que ha disminuido gravemente la libertad de prensa y los principios democráticos en el país.”
Varios periodistas han sido detenidos en los últimos meses mientras que el gobierno lucha para apaciguar las protestas. Arnaldo Sumoza, el director de un canal de televisión local, fue detenido el 15 de abril acusado de crear desorden público mientras cubría una manifestación sobre la escasez de agua en la comunidad de El Sombrero, en el estado de Guárico. SUmoza salió en libertad 30 días después pero con la obligación de presentarse ante fiscalía cada dos meses.
Eduardo Galindo Peña, director de la plataforma digital Senderos de Apure, fue detenido el mismo día por el Comando Nacional Antiextorsión y Secuestro (CONAS) de la Guardia Nacional de Venezuela en la ciudad de San Fernando de Apure, en el estado de Apure. Fue arrestado por información publicada en su portal y liberado cuatro días después.
Igualmente, en el mes de marzo, el periodista Darvinson Rojas fue detenido por su cobertura de la pandemia, ya que difundió cifras de infecciones que contradecían los reportes gubernamentales. Fue liberado tras 12 días detenido.